Batalla sin armas


Suspira, cierra los ojos y calla
al llegar la tormenta abrasadora.
Tormenta que sin piedad mueve
y hace temblar su alma.

Tras ella la noche intranquila
la cual ni consuela ni calma
el collar de perlas
que en sus mejillas arrastra.

Aparece curiosa el alba
pasada la oscura negrura.
Y los últimos golpes resiste,
mas cansada ella se rinde.

Afronta dignamente su derrota
y así gana su ansiada victoria.
¡Y ahora, pequeña mía,
respira, sonríe y habla! 

2 comentarios:

Víctor { 20 de junio de 2012, 22:01 }
Muy bien, Rocío. Te comento un par de cosas. Ten cuidado con las cacofonías que pueden aparecer en algunos versos y que a veces "rechinan" al oído, como "oscura negrura".
Por otro lado el estilo "romántico" que impregna el poema está bien, pero no olvides que estamos en el siglo XXI y tú tienes tu propia voz (yo la he visto en otros poemas). Deja que se te escapen los versos, no intentes encerrarlos, olvídate de captar una rima o un ritmo determinado y escribe para ti, para decir lo que sientes. Y sigue leyendo poesía, toda la que caiga en tus manos.
Rocío { 3 de octubre de 2012, 22:07 }
Hacia muchísimo que no me metía en el blog, y no había leído el comentario.

Este verano me he dejado un poco, he estado leyendo mucho (mucho, mucho), y he procurado escribir algo. Aunque no haya hecho gran cosa, la verdad.

Por lo del estilo romántico... pues me influye demasiado que mis autores favoritos sean Rosalía y Bécquer, sobre todo éste último. Es algo que, supongo, tengo medio automatizado. No me es fácil pensar en un poema, y tratar de no dar importancia a esa musicalidad que tanto gusta en ellos. Pero me apunto el consejo, ¡los versos son mi asignatura pendiente!

Gracias por todo. Y ya veré a ver si saco algo y pongo por aquí alguna cosilla.

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